Fue cuando trataban de derrocar al gobierno sandinista mediante la desestabilización y la violencia masiva. Lárez fue realmente tan servicial como para crear una falsa fundación en Venezuela, con el nombre de Fundación Nacional para la Democracia, como tapadera para recibir el dinero de la CIA y financiar las operaciones del periódico principal de la oposición en Nicaragua.[1]
“Como periodista”, dijo Lárez a sus colegas nicaragüenses, “comprendo los problemas con la libertad de expresión en esos países y las necesidades y dificultades de los medios de información escritos y hablados”. [2] Pocas semanas después, Carlos Andrés Pérez, presidente de Venezuela, amigo y aliado político de Lárez, ordenaría al ejército disparar contra inocentes manifestantes matando a centenares, quizás a miles, de activistas en las calles de Caracas. La RCTV de Lárez ayudó a enmascarar la realidad no ofreciendo imágenes de la masacre. [3]
De la misma manera, el 13 de abril de 2002, tras el apoyo ofrecido por RCTV y otros medios venezolanos al golpe de Estado contra el presidente Chávez, al menos sesenta manifestantes partidarios de Chávez fueron abatidos a tiros por el gobierno provisional de Pedro Carmona. [4] RCTV se negó a retransmitir los sucesos, y en su lugar ofreció dibujos animados y telenovelas mientras se mataba a la gente en las calles de la capital. [5]
Al parecer, la falsa preocupación de Lárez por la “libertad de expresión” no ha cambiado mucho con los años. Así que uno tiene que preguntarse, ¿puede no haber cambiado tampoco su relación con la CIA? Una revisión del papel de Lárez en la desestabilización de Nicaragua por parte de la CIA puede aclarar si Lárez y su RCTV están usando los mismos métodos en Venezuela.
La Prensa de Nicaragua: Un modelo para RCTV de Venezuela
En 1979, el mismo año en que los rebeldes sandinistas derrocaron a la brutal y larga dictadura de la familia Somoza, el Departamento de Estado estadounidense ya estaba buscando la forma de impedir que se produjeran cambios significativos en el país y establecer lo que denominaron “somocismo sin Somoza”. [6] Durante los años de gobierno sandinista, Estados Unidos y la CIA probaron casi todas las estrategias posibles a su disposición, incluida la ayuda estadounidense a las actuaciones violentas y de guerrilla dela fuerzas contrarrevolucionarias, las llamadas “contras”, para socavar, desestabilizar y, en su caso, derrocar al gobierno revolucionario sandinista. La utilización de los medios de información sería un elemento vital en la campaña.
En sus tentativas de crear un ambiente hostil en los medios, Estados Unidos ayudó, creó y financió la aparición de medios de información tanto en el interior de Nicaragua como en el exterior para formar opinión pública y desestabilizar al gobierno sandinista. En los primeros años, la CIA transmitía para Nicaragua desde emisoras de radio en países vecinos como Honduras, y financió las emisoras de radio de la oposición existentes en Nicaragua. Pero más tarde, Estados Unidos instaló sus propia emisora en el país, Radio Democracia, con dinero del National Endowment for Democracy de la CIA (NED, en sus siglas inglesas). La tarea, según el director de la emisora, sería la de “contrarrestar los instrumentos sandinistas para formar la conciencia del pueblo”. [7] Después de todo, era lógico, ya que una población bien informada no estaría de acuerdo con los planes de Washington sobre el “somocismo sin Somoza”.
Sin embargo, para Estados Unidos, el más importante medio de información, sería el bien conocido periódico de la oposición, La Prensa. Desde el mismo momento de la constitución del gobierno sandinista, el diario de Managua recibió millones de dólares de la CIA y del NED, la mayor parte de ellos canalizados secretamente a través de conexiones terceras como Eladio Lárez y el gobierno venezolano del presidente Carlos Andrés Pérez.
Lárez se reunió con el propietario de La Prensa, y con Violeta Chamorro, candidata predilecta de Washington para las elecciones de 1989, el año anterior a la celebración de éstas para crear una falsa fundación que recibiera dinero de la CIA, y lo transfiriera al periódico de la oposición. [8] Según un documento, la organización tapadera de Lárez, la Fundación Nacional para la Democracia, “no tendría que actuar como intermediaria salvo sobre el papel”. [9]
Lárez colaboró en, y fue testigo de primera mano, de los esfuerzos de EEUU para organizar la campaña de los medios de información de la oposición nicaragüense y promover a su candidata. Sus esfuerzos permitirían a Estados Unidos “comprar” las elecciones de 1990 en Nicaragua para la oposición tal como lo expresó George Miller, congresista por California: “Hemos adoptado a la sra. Chamorro, hemos pagado a su periódico para la campaña, hemos financiado por completo esta operación y ahora le vamos a proporcionar las mejores elecciones que Estados Unidos puede comprar”. [10]
La ayuda de la CIA hizo posible que el periódico jugara un papel clave en la campaña contra el Gobierno; el mismo papel, de hecho, que la CIA ha desarrollado en otros países que han sido víctimas de programas desestabilizadores. En Chile, el periódico El Mercurio, por ejemplo, jugó el mismo papel en la operación de la CIA contra el gobierno Allende en 1973, lo mismo que hizo el Daily Gleaner en Jamaica contra el gobierno de Manley en 1980. [11] Los medios de información pueden ser un instrumento muy útil para deshacerse de gobiernos populares, o incluso “indeseables”. En Venezuela, la RCTV de Eladio Lárez parece estar desempeñando el mismo papel.
Desestabilizar a Venezuela
Durante los pocos años que he estado analizando los media de Venezuela, ha habido un aspecto de la cobertura de noticias de RCTV que realmente se ha destacado: todo se centra en el presidente. Diariamente, de la mañana a la noche, la cobertura de noticias de RCTV y los espacios de entrevistas políticas parecen responsabilizar de todos los problemas del país en el pasado al gobierno de Chávez.
Resulta interesante que esta estrategia se corresponda en su totalidad con lo previsto en manual de la CIA y fuera puesto en marcha de la misma manera contra los sandinistas en Nicaragua. Un manual de la CIA, utilizado por grupos anti-sandinistas a quienes les enseñaba a detectar “las necesidades y frustraciones de grupos concretos” y a canalizarlos en forma de“una hostilidad generalizada contra el Gobierno”. El objetivo era conseguir que la población identificara al gobierno actual como el “causante de su frustración” y creer que esas frustraciones sólo podrían desaparecer con la salida de aquel gobierno. [12] Vincular todos los problemas del país con el gobierno central, o incluso con el propio presidente, es la estrategia empleada para crear una hostilidad y frustración antigubernamental generalizadas.
En Venezuela, el crimen, la corrupción, los secuestros, las huelgas, el paro, la pobreza, los problemas en las infraestructuras y la ineficacia general son siempre responsabilidad directa del gobierno central, o del propio presidente, casi como si ninguno de esos problemas hubiera existido antes de la llegada de Hugo Chávez. El secuestro y asesinato de tres niños en 2006, por ejemplo, sirvió durante meses para criticar al gobierno Chávez, lo mismo que el desplome del principal puente cercano a Caracas el mismo año. Incluso el aumento del índice de homicidios en el país ha sido atribuido literalmente a la “fogosa retórica del presidente”. [13]
Prácticamente todas las personas entrevistadas en RCTV casi siempre tienen un mensaje u otro para el presidente del país, incluso aunque el tema en cuestión sea simplemente un bache la carretera, o una calle inundada. Las quejas del ciudadano común parecen habitualmente dirigidas al presidente Chávez. Da la impresión de que RCTV lo hace a propósito, presumiblemente al preguntar a sus entrevistados si tienen algo que decir al presidente, para después emitir su respuesta y establecer una relación directa entre los problemas locales y el gobierno central. Al centralizar todos los problemas anteriores sobre el gobierno de Chávez, los medios de comunicación crean la imagen de que Hugo Chávez es la raíz, “la causa de su frustración”.
Estados Unidos también se sirvió de gran variedad de otro tipo de operaciones psicológicas secretas en la desestabilización de Nicaragua y desplegó una guerra informativa contra el Gobierno. En ella implicaron a periodistas manipuladores y a sueldo, difundieron informaciones falsas y propagandísticas, e influenciaron la cobertura informativa internacional del país. Como admitió un funcionario estadounidense, la guerra informativa en Nicaragua pretendía “ satanizar al gobierno sandinista para convertirlo en un enemigo real y en una amenaza.” [14]
Esa parece ser la misma estrategia empleada en Venezuela. Recientes revelaciones han demostrado también que algunos de los periodistas principales de la oposición venezolana han recibido dinero del gobierno estadounidense en los últimos años, [15] y que organizaciones financiadas por EEUU publican con frecuencia comunicados y convocan conferencias de prensa para criticar públicamente casi todas las decisiones del gobierno Chávez.
De forma continuada, el Departamento de Estado entrega informes propagandísticos a la prensa internacional criticando al gobierno venezolano en todo, desde la ley sobre las drogas y los derechos humanos a la corrupción. Estos informes afirman que Venezuela tiene una situación peor que la que tenía con gobiernos anteriores, e incluso peor que la de sus vecinos aliados de Estados Unidos, por ejemplo, Colombia que tiene una situación pésima en materia de derechos humanos. [16]
Los medios de la oposición como RCTV trabajan al unísono con los esfuerzos propagandísticos y ofrecen una gran cobertura de los informes estadounidenses y denuncias de organizaciones financiadas por Estados Unidos como Súmate o Primero Justicia. A los opositores al Gobierno se les da una cobertura casi diaria para hacer acusaciones de persecución política, amenazas para la democracia, recorte de libertades y problemas económicos, una y otra vez, semana tras semana, y año tras año.
Como William Robinson dice en su libro sobre la desestabilización en Nicaragua, A Faustian Bargain:
“Como un disco rayado, los temas de la falta de democracia en Nicaragua, la represión política, la persecución de la Iglesia, los desastres económicos, la militarización, la exportación de la revolución, etc., se repitieron diariamente durante el transcurso de una década”. [17]
Todo ello, con medios de oposición como RCTV responsabilizando rotundamente al Gobierno, ha logrado conseguir una muy eficaz “demonización” de Hugo Chávez. Para muchos ciudadanos venezolanos y estadounidenses, la campaña mediática ha logrado duplicar la estrategia de Nicaragua y “convertir a Hugo Chávez en un auténtico enemigo y en una amenaza”.
“Medidas” contra la libertad de expresión
Si la principal función del periódico La Prensa en Nicaragua fue desestabilizar al gobierno sandinista, una de las fórmulas utilizadas fue crear la imagen de que la libertad de expresión estaba recortada con el gobierno sandinista. Aunque en el país había otros periódicos y medios de información de la oposición, La Prensa logró crear la sensación de que era “el único periódico independiente de Nicaragua”, y trató de presentarse como víctima de un gobierno autoritario. William Robinson lo explica así:
“Las actuaciones de La Prensa son un manual de estudio sobre cómo funciona un órgano de la guerra psicológica. En este papel, La Prensa trabajó estrechamente con el personal de la embajada estadounidense en Managua y coordinó su política editorial al unísono con la estrategia de Estados Unidos y la Contra. Cuando los sandinistas trataron de contener los excesos en las actividades abiertamente desestabilizadoras de La Prensa por medio de una censura limitada, el asunto se le echó en cara como una prueba de sus “antidemocráticas tendencias”. [18]
Desde la toma de posesión del gobierno Chávez, los medios de comunicación privados como RCTV, han acusado sin parar al Gobierno de “coartar” a los medios privados e incluso han denunciado que están pagando a “grupos armados” para atacar a los periodistas. Ninguna de estas acusaciones jamás ha ido acompañada de pruebas o apoyada por hechos pero los media no han cesado en sus denuncias.
Sin embargo, la estrategia última de RCTV se parece increíblemente a la empleada en Nicaragua. Cuando el año pasado Chávez adelantó que no renovaría la licencia de emisión de RCTV que expiraba el 27 de mayo del presente año, RCTV hizo todo lo posible para aparecer como víctima de un gobierno “autoritario”. Y exactamente igual a lo hecho por La Prensa de Nicaragua, RCTV denunció que el Gobierno estaba reprimiendo al “único medio independiente” del país.
Durante los meses anteriores a la fecha límite del 27 de mayo, la programación de los noticiarios de RCTV se centró completamente en lo que denominaron el “cierre” del canal, y el “silenciamiento de la oposición”. Pero, nunca mencionaron que la emisora no se iba a cerrar sino que simplemente se la sacaba del espacio de VHF y podía seguir emitiendo por cable.
El canal privado, junto a los partidos políticos de la oposición (muchos de los cuales están financiados por el Departamento de Estado norteamericano), organizaron acusaciones públicas, manifestaciones políticas y protestas en las calles que fueron creciendo hasta el 27 de mayo, fecha en la que se alcanzó el clímax de varios meses de protestas y “resistencia” en contra del “cierre”. Las protestas en la calle los días previos a la fecha límite fueron utilizadas por RCTV y los medios de información internacionales para denunciar que el gobierno de Chávez estaba “ tomando duras medidas” contra los medios independientes y “reprimiendo “la libertad de expresión” Las protestas aisladas de ciertos sectores de la población fueron manipuladas para que dieran la impresión de ser un movimiento de protesta masivo contra un gobierno represivo.
Sorprendentemente, este “movimiento de protesta” no se produjo sólo en Venezuela. Una situación similar en Nicaragua, organizada con la ayudad de la embajada estadounidense, sirvió para dar la imagen de “un creciente movimiento de protesta” contra los sandinistas. Cuando una actividad conjunta de la embajada y de la oposición terminó con enfrentamientos entre la policía y los manifestantes, el gobierno sandinista detuvo a muchas personas y acusó a la CIA de organizar los incidentes para provocar la violencia. Los hechos fueron calificados en EEUU y en la prensa internacional de “represión” de las libertades civiles y de “duras medidas” del sandinismo. [19]
Meses después, las denuncias de los sandinistas se vieron confirmadas cuando Jim Wright, presidente de la Cámara de Representantes, afirmó que el Congreso “había recibido testimonios concluyentes de que la gente de la CIA deliberadamente había realizado actuaciones para provocar una reacción desmesurada del gobierno de Nicaragua”. El objetivo había sido “provocar disturbios o excitar a los funcionarios sandinistas”. [20]
El video de los manifestantes en Nicaragua mostró que fueron ellos quienes iniciaron las acciones violentas al atacar a la policía exactamente de la misma manera que los manifestantes de la RCTV habían hecho dos meses antes enfrente de la Comisión Nacional de Telecomunicaciones. [21]Y los manifestantes de RCTV trataron de vestirse de forma similar, con camisetas y ropa distribuida por RCTV y por los partidos de la oposición. Los manifestantes de Nicaragua habían hecho lo mismo, según las secuencias del video, al vestirse con guayaberas de vivos colores y pantalones oscuros. [22]
Todo ello resulta misteriosamente parecido a lo descrito en el capítulo del manual de la CIA: Psychological Operations in Guerrilla Warfare (Operaciones psicológicas en la guerra de guerrillas), utilizado por las fuerzas anti-sandinistas. En el apartado dedicado a cómo organizar revuelta urbanas, el manual aconseja que las fuerzas insurrectas vistan igual, de forma que unos puedan identificar fácilmente a los otros y situarse estratégicamente antes de que los agentes políticos infiltrados en la muchedumbre inciten a la gente a “enfrentarse violentamente al Gobierno”. Según dice el manual, una vez que estos “cuadros” han suscitado “una gran hostilidad contra el régimen”, la situación está madura para derrocar al Gobierno. [23] No sólo todo esto resulta muy similar a la estrategia seguida por los manifestantes de RCTV durante las manifestaciones de mayo de 2007 sino también a la de los manifestantes de la oposición, alentados por RCTV durante el intento de golpe de Estado de 2002 que de forma temporal derrocó al gobierno de Chávez.
Poco más de un mes después del cese de emisiones de RCTV el 27 de mayo, el canal comenzó a transmitir otra vez en Venezuela, en esta ocasión por cable y satélite. Pero, una vez más, el canal enseguida causó problemas al negarse a cumplir con las normas reguladoras de los medios, que obligan a todos los de ámbito nacional a transmitir los mensajes de interés público emitidos por el Gobierno, así como el himno nacional todos los días. De nuevo se produjo un enfrentamiento cuando RCTV aseguró que no iba a cumplir las leyes nacionales alegando que ahora era un canal “internacional” con sede administrativa en Miami. El gobierno venezolano respondió advirtiendo a RCTV que si no cumplía las leyes, se vería obligado a expulsarlos de las ondas de nuevo. [24]
Repitiendo la estrategia empleada por La Prensa para suscitar conflictos con el gobierno y cuando éste respondía denunciar que había represión, RCTV aprovechó las circunstancias para iniciar otra campaña sobre “represión” de los “medios independientes” y “ataques a la libertad de expresión”. A ella se unieron otros medios privados e internacionales pero ninguno hizo mención al hecho de que la libertad de los medios privados para hacer estas acusaciones era una prueba evidente de la completa libertad de expresión en el país.
Si los hechos y la estrategia de la oposición en Nicaragua, y en el periódico La Prensa, financiado por la CIA, pueden suponer un indicio, parece que RCTV está siguiendo exactamente la misma estrategia de desestabilización de la que se ha servido la CIA en otros países. Tal como demuestran los manuales y documentos de la CIA, además de las pruebas que ofrece el libro de William Robinson, La Prensa fue un instrumento importante en la desestabilización provocada por la CIA en Nicaragua y, con la ayuda de Eladio Lárez, la campaña consiguió en la práctica derrocar al gobierno sandinista.
El objetivo de la CIA en Venezuela es el mismo, RCTV parece estar desempeñando el mismo cometido. Aunque, hasta la fecha, no existen pruebas contundentes de que RCTV esté recibiendo financiación relevante de la CIA, las previas vinculaciones de Eladio Lárez con ella parecen indicar que existe una gran probabilidad de que así sea.
Chris Carlson es un periodista independiente y activista que vive en Venezuela. Pueden consultar su blog personal en www.gringoinvenezuela.com
Notas
[1] CovertAction Information Bulletin, 34, Verano, 1990
[2] William Robinson, “ A Faustian Bargain: U.S Intervention in the Nicaraguan Elections and American Foreign Policy in the Post-Cold War Era”, p. 246
[3] Según el testimonio de testigos presenciales de la cobertura de la masacre del “Caracazo” en 1989, RCTV y otros medios privados no emitieron los sucesos durante y después de la masacre. Las imágenes de aquellos días demuestran que los canales continuaron con su habitual programación comercial. En los editoriales de Eladio Lárez en televisión en directo durante los días cercanos a la masacre, elogia los esfuerzos del Gobierno para poner “un rápido final a la crisis”.
[4] Human Rights Watch, Informe anual 2003, Venezuela, New York, 2003.
[5] Durante la insurrección popular de los partidarios de Chávez tras el golpe de Estado del 11 de abril de 2002, RCTV y otros medios privados declararon que no emitirían imágenes que podrían “causar daño a la estabilidad del país”. En su lugar, RCTV y otras emisoras privadas emitieron programas de entretenimiento a pesar de las exigencias de la gente que estaba en las calles para que informaran de la rebelión popular que estaba teniendo lugar en el país.
[6] El embajador estadounidense ante la Organización de Estados Americanos habló a favor de instalar el “somocismo sin Somoza”. Es decir, mantener el mismo sistema económico y político básico pero sin el dictador Somoza. Tomado de Noam Chomsky, What Uncle Sam Really Wants?, Odonian Press, 1993. http://www.thirdworldtraveler.com/Chomsky/ChomOdon_Nicaragua.html
[7] CovertAction Information Bulletin, 34, Verano de 1990.
[8] En el Apéndice de su libro, Robinson reproduce un fax interno de La Prensa, de Cristina Chamorro, hija de Violeta, en el que describe su reunión con Eladio Lárez y el plan para crear la Fundación en Venezuela, p. 247.
[9] Robinson, p. 93.
[10] George Miller, (Demócrata por California): “Estamos gastando en este proceso electoral 1.000 millones de dólares. Hemos financiado a los Contra, hemos destruido la economía [de Nicaragua], hemos elegido a la sra. Chamorro y pagamos a su periódico la campaña, hemos financiado su operación totalmente y ahora le vamos a poner en bandeja las mejores elecciones que Estados Unidos puede comprar”. Archivos del Congreso, Cámara de Representantes, 4 de octubre de 1989 p. H6642.
[11] Robinson, p. 79.
[12] Psychological Operations in Guerrilla Warfare, The CIA’s Nicaragua Manual, manual preparado por la CIA para los contras. (New York: Vintage Books, 1985). p. 70
[13] Los medios de la oposición y los grupos políticos han atribuido habitualmente aumento del índice de homicidios al (lenguaje de odio [sic en español] del presidente y a que con él está (sembrando odio) en la sociedad.
[14] Robinson, p.77
[15] “Documents Reveal U.S. Effort to Influence Venezuelan Journalists,” Venezuela Analysis, 26 de amyo de 2007. http://www.venezuelanalysis.com/news.php?newsno=2309
[16] Véanse el Informe estadounidense sobre tráfico de personas de 2006 o el Informe sobre derechos humanos en los se elogia a Colombia y México por sus “avances en derechos humanos” mientras se condena a Venezuela por “estar actuar al margen de las normas democráticas”. O el reciente informe sobre drogas que de nuevo elogia a los aliados de Estados Unidos, como Colombia y México, y condena a Venezuela por “no cooperar con los funcionarios estadounidenses”. Véase, asimismo, International Narcotics Control Strategy Report (INCSR) de 2007. http://www.state.gov/p/inl/rls/nrcrpt/2007/, y el Informe del Departamento de Estado: Supporting Human Rights and Democracy: The U.S. Record 2006, publicado por el Bureau of Democracy, Human Rights and Labor. http://www.state.gov/g/drl/rls/shrd/2006/80591.htm
[17] Robinson, p.71
[18] Robinson, p. 80
[19] Robinson, p. 43.
[20] Jim Wright de la Cámara de Representantes de Estados Unidos, New York Times, 20 de septiembre de 1988.
[21] “ Protests For and Againts RCTV Continue in Caracas” [Continúan en Caracas las protestas a favor y en contra de RCTV]
[22] Robinson, p. 43
[23] Psychological Operations in Guerrilla Warfare, pp. 80-90
[24] El Universal: “Chacón: Registro de RCTV Internacional ante CONATEL es un requisito exigido por la Ley”. 29 de julio de 2007.
Venezuelaanalysis.com, 8 de agosto de 2007
No hay comentarios:
Publicar un comentario